Las Comisiones de Asuntos Constitucionales, Defensa Nacional y Fuerza Pública y la Comisión de Legislación, Codificación, Justicia y Trabajo en una sesión conjunta, recibieron hoy a los tres ternados para llenar la vacancia de la Corte Suprema de Justicia. De esta manera, el Dr. Alberto Joaquín Martínez Simón, el Dr. Rubén Darío Romero Toledo y el Dr. Emilio Camacho Paredes, expusieron ante los legisladores y respondieron a las preguntas que les fueron hechas.
Bajo la presidencia del senador Sergio Godoy, primeramente, ingresó a la sala de sesiones el Dr. Alberto Martínez Simón, quien respondió una serie de preguntas realizadas por los Senadores. El jurista explicó que fue contratado en el año 1994, por el Estudio Jurídico Palacios Prono y Talavera, que se dedicaba a atender clientes corporativos como entidades financieras de diferentes grupos económicos.
Refirió que trabajó por 10 años en el estudio jurídico del cual se desvinculó en el año 2003, y comenzó a trabajar como magistrado.
Posteriormente, ingresó el Dr. Rubén Darío Romero Toledo, quien manifestó que su objetivo principal es combatir y erradicar la corrupción del Poder Judicial, dijo que desea aprovechar la tecnología dentro de los esquemas procesales, para avanzar en la eficiencia y transparencia de la administración de la justicia.
Añadió que buscará eliminar el nepotismo, la morosidad, el tráfico de influencia y el secretismo; pretende lograr la descongestión judicial, promover el concurso interno de los funcionarios del Poder Judicial, mediante examen de méritos y aptitudes, ya que los mismos no poseen la preparación para desenvolverse en el área judicial.
Finalmente, ingresó el Dr. Emilio Camacho, quien expuso sus objetivos al pleno de la Comisión. “La crisis profunda que atraviesa nuestra sociedad también reconoce una dimensión nítidamente jurídica, el derecho no puede ni debe ser guardián de situaciones y observar impasibles los hechos”, comenzó diciendo el constitucionalista.
“El magistrado judicial que pretende llegar a la Corte tiene una forma de ver y entender el derecho y por lo tanto va tener una forma de aplicar el derecho, de aplicar justicia; en consecuencia, el pensamiento jurídico que lleve cada magistrado influye en su manera de interpretar y aplicar el derecho” indicó.
Sostuvo que probablemente el poder judicial paraguayo sea una gran asignatura pendiente en nuestra transición democrática. “Se debe combatir el corporativismo judicial, el Poder Judicial debe abrirse, el juez debe recibir a los justiciables, a los abogados a los que padecen la persecución o un pleito el poder judicial; debe cambiar radicalmente la forma en que hoy está encerrada de que hay una acordada del código de ética, que para recibir a una de las partes debe estar la otra parte, entonces nunca te reciben salvo que vos levantes el teléfono”, se lamentó.
Significó que en términos jurídicos “la tutela judicial efectiva, el pobre, el rico, el débil, el poderoso tiene que tener acceso directo”.
Los legisladores analizarán el curriculum de cada postulante para luego emitir un dictamen.