En el Parlasur reclamarán la decisión unilateral uruguaya sobre etiquetado

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Representantes de diversas organizaciones empresariales, acompañados de un equipo técnico, realizaron esta mañana una reunión con parlamentarios paraguayos del Mercosur en la que ratificaron su disconformidad sobre la decisión unilateral uruguaya de plantear un nuevo etiquetado frontal para los alimentos, por encima de las normas del Mercosur y de su propio Congreso y que, a la vez, puede representar una merma importante en la exportación paraguaya. 

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En tal sentido, la posición de las bancadas (ANR, PLRA y Frente Guasu) será de intervenir en la LVIII sesión ordinaria a los efectos de reclamar dicha situación, al tiempo de plantear una resolución del pleno en el que se solicite al gobierno uruguayo reconsiderar la resolución que establece el nuevo distintivo. 

En relación a la reunión de esta mañana, estuvieron presentes Carlos Insfrán, de CEPALI (Cámara de Empresas Paraguayas de Alimentación), Roberto Urbieta, de la Cámara de Alimentos y Bebidas (CABE), el industrial Marcos Riquelme (Mazzei), acompañados de un equipo técnico. 

Los técnicos dieron especificaciones sobre la situación ante los parlamentarios paraguayos y centraron sus objeciones en que el nuevo rotulado escapa al Codex Alimentarium (FAO), que es el que se aplica en el Mercosur, por lo que constituye una restricción para arancelaria, además de unilateral. Remarcaron también que no están en desacuerdo con un nuevo rotulado, siempre y cuando se realice de manera consensuada. El etiquetado nuevo uruguayo es un octágono negro, que dice ya sea “exceso de grasa”, “exceso de grasas saturadas” o de sodio y azúcares.

Marco Riquelme precisó que no están en desacuerdo con un precintado, pero enfatizó la necesidad del consenso, al tiempo de calificar la exigencia uruguaya como “técnicamente no coherente”, pues el “rombo negro, que dice alto en azúcares para aquel producto que tiene tres gramos de azúcar cada cien gramos es el mismo etiquetado para el que tiene noventa gramos de azúcar, como un caramelo y tiene treinta y ocho veces más que el primero”.

Carlos Insfrán, de CEPALI, señaló que desde su inicios, el Mercosur ha tenido muchas aristas de desigualdades y que la corriente del etiquetado ya se había iniciado en el 2016, pero existía el acuerdo de llevar adelante de manera consensuada, lo que se rompió con la decisión uruguaya, que pasó por alto la reglamentación existente en la materia desde el año 1993.

El parlamentario Nelson Argaña coordinó la reunión de hoy. Sobre el punto, hablaron Blanco Lila Mignarro, Manuel Morínigo y Ricardo Canese, entre otros, y coincidieron en que se trata de una media para arancelaria y que crea confusión en el consumidor y que era necesario, como órgano político, expresarse en la plenaria de este lunes.