El senador Patrick Kemper, anunció el jueves en la sesión ordinaria del Senado, que se encuentra trabajando en un proyecto de Ley, que tiene como objetivo eliminar el subsidio a las empresas de transporte y otorgar este beneficio directamente a los pasajeros, a través de las tarjetas del billetaje electrónico, con la compra o recarga de los mismos.

La presentación de su iniciativa lo hizo cuando el Pleno se encontraba analizando el proyecto de Ley “Que cancela la licencia, itinerario y subsidio a empresas del transporte público infractores de la ley”, presentado por su colega el senador Enrique Salyn Buzarquis, que tuvo aprobación.

El senador Kemper comentó que, previamente se hará una mesa de trabajo con el viceministerio de Transporte y todos los sectores involucrados para avanzar en el proyecto.

Explicó que su propuesta trata de promover que el subsidio que queda en mano de los empresarios transportistas pase finalmente a los pasajeros, a quienes lógicamente siempre se intentó beneficiar con este mecanismo, pero que “no se siente en la calle, no se ve y que lastimosamente siempre fue una herramienta más para que los empresarios presionen al Gobierno”, enfatizó.

“Básicamente, si el subsidio sale del dinero de los paraguayos, que este vuelva a los mismos, pero de forma más directa. Hoy en día para viajar en los ómnibus se utilizan las tarjetas magnéticas para pagar el pasaje. Queremos que el subsidio llegue a esa tarjeta, tanto al adquirirla como cuando se hace una recarga, automáticamente se le sume a este el monto correspondiente al subsidio. Aprovechemos esta plataforma para hacer llegar a los pasajeros este beneficio. Nos parece una medida justa y que va de la mano con la modernización del servicio”, puntualizó.

Asimismo, el legislador argumentó que la normativa se ajustará a la necesidad del cambio en la estrategia del subsidio, aclarando que no todos extorsionan al gobierno con las históricas reguladas, por lo que es hora de replantear la participación del Estado en el tema.

“Basta con salir a la mañana a ver cómo la ciudadanía viaja a sus lugares de trabajo en los colectivos repletos, exponiéndose peligrosamente porque los índices de contagio no paran de subir. La constante extorsión de algunos empresarios del transporte, y si, lo llamo una extorsión, porque amenazan al humilde trabajador con no poder llegar a su lugar de trabajo para presionar al gobierno”, remarcó.

Agregó que, su planteamiento se basó en la propuesta de un joven empresario de nombre Alejando Zucolillo, de la Confederación de Transportistas del Paraguay, y que el mismo tiene un objetivo trazable y realizable.