Este lunes, se realizó una reunión virtual y presencial organizada por la Comisión de Energía, Recursos Naturales, Población, Ambiente, Producción y Desarrollo Sostenible, que preside el senador Sixto Pereira, en forma conjunta con la Comisión de Pueblos Indígenas.

^{Reunión realizada en sede de la Comisión de Energía.}

En la ocasión, varias personas fueron convocadas para analizar en detalle el proyecto de ley “Que aprueba el contrato de concesión suscrito entre el gobierno de la República del Paraguay y la empresa Zeus Öl S.A. para la prospección, exploración y explotación de hidrocarburos en la Región Occidental de la República del Paraguay”.

La reunión se realizó a los efectos de contar con los informes técnicos oficiales con respecto a la zona de avistamiento de indígenas ayoreo totobiegosode silvícolas no contactados en la zona de concesión para la prospección de hidrocarburos en el Chaco paraguayo, a fin de conocer el protocolo en caso de presencia de indígenas silvícolas y los ajustes en el plan de gestión.

Cabe recordar que, el proyecto cuenta con media sanción de la Cámara de Diputados, y durante estos días se dio a conocer ciertas inquietudes de varias organizaciones desde el punto de vista socioambiental, que podría afectar a pueblos originarios y al medio ambiente.

^{Encuentro mixto (presencial-virtual), a través de la plataforma virtual.}

Al respecto, Omar Pico, presidente del Instituto Paraguayo del Indígena (INDI), explicó que expuso su posición sobre el proyecto, el cual está basado en una jurisprudencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos y un convenio.

El funcionario argumentó que tienen dos cuestiones dentro de este proyecto; uno que es con relación a los pueblos indígenas no contactados y otro que son las comunidades indígenas afectadas. “Tenemos jurisprudencia de que cuando existen concesiones para cuestiones extractivas, necesitamos sí o sí el consentimiento de esas comunidades que podrían ser afectadas”, expresó.

Por lo tanto, manifestó el Pdte. del INDI, que sugirieron a las comisiones llevar adelante las consultas previas e informadas a las comunidades indígenas contactadas. Con relación a los no contactados, señaló que la jurisprudencia establece claramente que los proyectos no deben afectar su convivencia. Las comunidades que existen en las periferias, en las cercanías deben ser consultadas” recalcó.

Asimismo, refirió que el proyecto no afecta al Parque Nacional Médanos del Chaco, porque está fuera de cualquier área silvestre protegida.

Por su parte, Marco Pappalardo, gerente de la empresa ZEUS, respondió que cumplen con todas las leyes, no solamente la del Paraguay, sino que se acogen a normativas internacionales para cumplir estos cometidos. En ese sentido, comunicó que han firmado un contrato de adhesión que significa que el Estado paraguayo tiene un modelo de contrato en el que la empresa (Zeus) aceptó las condiciones.

^{Presentación de la zona de influencia, donde se prestende llevar a cabo el proyecto.} 

Agregó que este proyecto debe beneficiar a todos y que no les interesa entrar en ningún parque, “sabemos perfectamente nuestra limitación”, expresó el gerente de Zeus y en ese sentido, dijo que, en el proyecto se establece una protección de dos kilómetros con relación a la zona de exploración.

En otro momento, varios fueron los representantes de comunidades originarias que expresaron su parecer sobre el proyecto, quienes manifestaron que no están en contra del desarrollo, pero que la mayoría de los chaqueños no están bien informados sobre el tema.

Del encuentro participó el senador Blas Lanzoni, junto a representantes de comunidades indígenas del Chaco, organizaciones y técnicos especializados en el tema.