La Comisión de Salud Pública y Seguridad Social, que preside el senador Jorge Querey, realizó su encuentro ordinario para el tratamiento del proyecto de Ley “Que modifica el artículo 38 de la Ley 1119/1997`De productos para la salud y otros”.
Miembros de la comisión durante la reunión.
Para el estudio del documento, se contó con la participación de uno de los proyectistas, el diputado Rodrigo Blanco, quien explicó que actualmente la institución encargada de la fijación de precios de los medicamentos es la Dirección Nacional de Vigilancia Sanitaria (DINAVISA) y que este procedimiento se realiza mediante una comisión, conformada por representantes del sector privado y la dependencia de Salud Pública, siendo ésta la única institución que representa los intereses del área pública.
Agregó que el primer planteamiento de esta propuesta legislativa va dirigida a que la comisión encargada de fijar los costos de medicamentos en el país sea conformada mediante una ley, en donde se requiera la participación de instituciones de ambos sectores, en igual cantidad.
Y, en segundo lugar, con este proyecto de ley buscan que la fijación de precios se realice de manera anual con una previsión de los costos de importaciones que deben ser presentados por las empresas.
En su intervención la senadora Esperanza Martínez, afirmó que es muy importante tener en cuenta lo expresado por el diputado, teniendo en cuenta la cantidad de personas que requieren de servicios farmacéuticos, especialmente en estos tiempos. Además destacó que se debe realizar un estricto seguimiento del caso, ya que la suba de medicamentos afecta también la canasta básica familiar.
Por su parte, el senador Stephan Rasmussen propuso modificar el inciso C del artículo 38, de manera que los ajustes de la definición de precio máximo se realicen siempre que la variación de costo sea superior o inferior al 5 % y no necesariamente de manera anual.
La senadora Desirée Masi, afirmó que el porcentaje que se estudia es aproximado, ya que en la variabilidad de los precios, en ocasiones, se distinguen costos mayores o menores a la base tomada por la institución encargada para el estudio. Además, destacó que sería beneficioso comparar valores internacionales, para tener una visión más clara del asunto.
El senador Jorge Querey, usó como ejemplo el costo de un medicamento que en el año 2016 valía 900.000 Gs., lo que correspondía a un precio máximo establecido de 1.600.000 Gs. En el 2018 el importe en las farmacias por este medicamento fue en descenso, llegando a 100.000 Gs., sin la variación máxima que se mantiene en 1.600.000. Agregó también que los cálculos y estudios se deben realizar cada dos meses.
